Esmeralda
De las piedras preciosas que sirven para la joyería, la esmeralda, mantienen una posición privilegiada debida a su color extraordinario y a su peculiaridad. A causa de la dificultad para extraerla su costo es alto, más cuando son raras debido a su gran tamaño y buen color.
La esmeralda, con su color verde brillante, no es igualada por ninguna otra piedra; los ejemplares más valiosos proceden de Colombia en donde se encuentran localizados los principales yacimientos en las célebres minas de Muzo, y de Cosquez en la región de Chivor, aunque también las hay en Brasil (las cuales tienen variedad de colores que van desde el verde claro hasta el medio oscuro) que salen hoy en día de las minas de Nova Era; Zimbabwe, que reciben el nombre de esmeraldas “sandawaba” gracias a la regios de donde se extraen y su peso es menor al de un kilate; Rusia tiene depósitos en el Ural Norte de Sverdlovsk. Otros lugares en donde se encuentren, pero con poca producción y baja calidad están en el Afganistán, Australia (Nueva Gales del Sur, Australia Occidental), Filipinas, Ghana, India, Madagascar, Malawi, Mozambique, Namibia, Nigeria, Pakistán, Tanzania, Zambia y los Estados Unidos (en Carolina del Norte).
Las primeras minas de esmeralda mencionadas en la historia fueron las de la época del Imperio del Antiguo Egipto, cerca del Mar Rojo siendo utilizadas las piedras para adornar a los faraones, y nombradas posteriormente como “minas de Cleopatra”. En Europa, los Alpes austriacos en el antiguo yacimiento de Habachtal, proporcionaron algunas esmeraldas encontradas en ciertas joyas de las coronas europeas.
En la época de la conquista el denominado “fuego verde” resultaba tan fascinante que los conquistadores españoles llevaron a cabo una campaña sangrienta con el fin de descubrir la localización de las minas de esmeralda en América del Sur, pero incluso bajo tortura, los incas no revelaron sus fuentes. En 1557, la campaña finalmente concluyó con el descubrimiento accidental de las espectaculares minas de Muzo y Chivor en la actual Colombia.
Es muy raro encontrar esmeraldas de buena calidad que tengan un tamaño superior a un quilate, ya que las esmeraldas grandes contienen inclusiones perceptibles a simple vista -que generalmente son toleradas-, conocidas como “jardín” o “hierba”, las cuales son como una huella digital, pues dan a cada esmeralda una característica distinta, por lo cual se puede deducir que es de extrema rareza una esmeralda totalmente transparente; las esmeraldas de color verde intermedio intenso poseen el máximo valor y si la piedra contiene matices azules o amarillos disminuye su valor.
Cuando se examina boca arriba, una esmeralda de muy buena calidad deberá permitir al observador ver la faceta trasera. La brillantez de la piedra preciosa, que viene determinada por la talla y el número de inclusiones, también es un factor importante de valoración.
Debido al alto costo y la dificultad en encontrar esmeraldas perfectas, los joyeros desarrollan diversas maneras de hacer menos visibles las imperfecciones de las piedras, entre las cuales se encuentran la impregnación de aceites en las fisuras, también calientan la piedra para presentar un mejor color; actualmente se utiliza el ultrasonido o vapor para limpiar las esmeralda, sin embargo, estos procedimientos podría deteriorar la piedra, causando fracturas, por eso, sólo los joyeros profesionales deben encargarse de la limpieza de las esmeraldas.
Los cortadores de esta gema, han desarrollado un corte especial justo para esta piedra: el corte esmeralda. El diseño claro de este corte rectangular o cuadrado con sus esquinas oblicuas resalta la belleza de esta piedra preciosa y al mismo tiempo la protege de tensión mecánica, no obstante su corte clásico las esmeraldas también son cortadas en muchos otras formas, por ejemplo en forma de gota, que son muy populares en la India.
Entre las esmeraldas famosas se encuentra el denominado “Mogul Esmeralda”, denominada así porque perteneció al último de los emperadores mongoles conocido como Aurangzeb. Esta piedra personifica la cultura, la literatura y el arte indio del siglo XVII, sus dimensiones son 5.2×4.0 y tiene un grosor de 2 cms. pesa 217,80 quilates. Gracias a que a los mongoles de la India les gustaban tanto las esmeraldas que grababan en ellas sus textos sagrados y las portaban como talismán, ejemplo de ello es el Mogul Esmeralda el cual está inscrito con textos de oración, y grabada en el otro hay adornos florales magníficos.
La esmeralda de Maximiliano denominada así porque perteneció al archiduque de Austria Fernando Maximiliano, se dice que perteneció a Cuauhtemoc, último emperador azteca.
El Museo New York de Historia Natural, tiene una exposición en la que una taza hecha de pura esmeralda, que pertenecía al emperador Jehangir, la cual es mostrada al lado de “Patricia”, uno de los cristales de esmeralda colombiana más grande, que pesa 632 quilates.
Esmeraldas espléndidas forman parte del Tesoro Nacional iraní, que adornan, por ejemplo, la diadema de la ex emperatriz Farah Diva.
Uno de los anillos más famosos de la historia estaba formado por una gran esmeralda engarzada en oro; perteneció a Alejandro Magno, cuya efigie estaba grabada en la piedra.
Las joyas de la corona imperial rusa, que estaban en el Kremlin, eran famosas por sus magníficas esmeraldas. La tiara del Papa está adornada con una esmeralda que tiene la forma de un cilindro corto y redondeado en una de sus extremidades. Mide 27 milímetros de largo por 34 de diámetro.
Elizabeth Taylor tiene una colección de esmeraldas relacionadas con uno de sus esposos Richard Burton quien le dio el broche de esmeraldas y diamantes como presente de compromiso, y un collar de esmeraldas que él le dio como regalo de bodas. Posteriormente adquirió, la pulsera y el anillo.
Debido a que el rico color verde de la esmeralda es el color de la primavera, esta piedra ha sido apreciada desde hace más de 4000 años por diferentes culturas del mundo, por lo tanto la historia de la esmeralda es tan fascinante como voluminosa.
Desde la antigüedad se la usa para curar enfermedades de los ojos. Se dice que Nerón, el emperador romano, que era miope, usaba una lente de esmeralda para mejorar su visión.
En las sagradas escrituras de los indios, los Vedas, hablan de las gemas verdes preciosas y sus propiedades curativas: «Esmeraldas prometen buena suerte…” y “La esmeralda mejora el bienestar. Por lo tanto, no es de extrañar que los cofres del tesoro de maharajás y maharanis en la India contuvieran esmeraldas maravillosas. Se creía que la esmeralda daba la capacidad sobrenatural de predecir el futuro.
Como a todas las piedras preciosas y joyas, a las esmeraldas se les han atribuido cualidades curativas y de protección, creadoras de afectos y sentimientos, por ejemplo en la antigüedad se la apreciaban por ser la piedra que simbolizaba el amor, el renacimiento y la eterna juventud. y de que tenía cualidades de antídoto para ciertos venenos, y se creía, también, que curaba de muchas enfermedades.
Actualmente se le atribuyen a las esmeraldas una variedad sorprendente de virtudes. Entre otras cosas, que la esmeralda da una excelente memoria, una buena elocuencia y se supone que desarrollaba la inteligencia. Es utilizada como elemento de protección contra las enfermedades, se creía que las mujeres portadoras de una esmeralda estaban inmunizadas contra la epilepsia.
Se dice que es útil para el tratamiento de: colitis, problemas de estomago, problema ocular, del corazón, del sistema nervioso, riñones y del páncreas; y mejora el sistema inmunitario, los problemas del estómago y del corazón.
Actúa como estabilizador y tranquilizante interno y emocional; purifica e espíritu, y devuelve la capacidad de razonar objetivamente y mejora la memoria. También, se expresa que ayuda a regular el erotismo y la creatividad, por lo que se considera adecuada para los que sufren miedos y angustias. Ayuda frente a ataques de pánico, epilepsia y hemorragias; es muy positiva para personalidades inseguras que temen al fracaso. Promueve la acción en casos de fatiga crónica.
Los que trabajan con talismanes puesto que se relaciona con la buena suerte y la clarividencia. Otorga alegría a quien lo porte y afirman que cuando el miedo se apodera de las personas se requiere poner una esmeralda debajo de la almohada, o llevar un anillo o colgante con esa piedra.
Por su color se le relaciona con la naturaleza y por lo tanto no es extraño que esta gema simbolice la abundancia.
Popularmente se dice que la esmeralda es la piedra de los nacidos durante el mes de mayo, de los aniversarios de matrimonio 20°, 35° y 55°.
Astrológicamente hablando, es afín con los signos: tauro cáncer, Escorpio, Sagitario, Capricornio, Acuario, Libra, está relacionado con la tierra.